El Gobierno tiene vía libre para eliminar las barreras y las cabinas de peaje. Cada vez falta menos para cambiar las barreras y cabinas de peaje por el sistema de cobro automático por medio de la lectura de la patente, un mecanismo ya implementado por varios países.
El plan del Gobierno dio un paso firme hacia allí, luego de que el Registro de la Propiedad del Automotor autorizara a los concesionarios viales a tener acceso a la base de datos de patentes de la Argentina, de acuerdo a una disposición publicada por el Ministerio de Justicia de la Nación. Esta información tendrá un precio, que prevé aranceles mínimos y máximos, según la cantidad de consultas mensuales realizadas por los concesionarios.
“Esto posibilitará la complementación de un servicio de peaje dinámico, a partir de la captura mediante dispositivos electrónicos capaces de leer, entre otras cosas, el dominio inserto en las placas de identificación metálica de los automotores”, explica la disposición 335/2018.
El objetivo de esta medida es que todos los autos circulen sin la necesidad de detenerse en las cabinas de peajes. Su llegada estuvo demorada por la situación del personal de cabina, no obstante se firmó un acuerdo entre el Sindicato de Empleados de Comercio y Autopistas Urbanas para que la instrumentación sea gradual de 2018 a 2022 para que los empleados afectados puedan reinsertarse en otras áreas de la empresa.
Primero se implementaría en el Paseo del Bajo, que conectará las autopistas Illia y Buenos Aires-La Plata, durante los primeros meses de 2019. Todavía no se informó si los precios sufrirán variaciones.
Cómo funcionará
La idea es que cuando los autos pasen por la zona de peaje las concesionarias viales capten la patente del vehículo y al finalizar el día consulten esa información en el Registro Automotor a través de un portal web (no público) al que tendrán acceso.
En ese portal se tendrá información sobre el titular de la patente para que las concesionarias puedan hacer el cobro. Esta verificación del dominio no se hará en tiempo real, sino de manera diferida, una vez al día, según explicó Oscar Agost Carreño, subdirector nacional del Registro Automotor.