El fiscal de delitos complejos Enrique Gavier dispuso que los acusados en la causa por asociación ilícita sigan detenidos. Hay un centenar de estafados en todo el país.
“ E l proyecto OneCoin es un negocio donde podés hacer una gran diferencia, cuanta más gente metas en el evento, tu cheque, tu ingreso va a ser mucho mayor… OneLife te paga doble, por eso esta compañía es tan generosa y tiene el crecimiento explosivo que tiene. Yo considero a esta moneda como la más sólida… En este negocio fabricamos dinero. Esto es un negocio gente… Yo tengo 27 millones de patadas en el trasero detrás de mí que todos los días me dicen que esto va a funcionar, con vos o sin vos”.
Estas definiciones reproducidas en diferentes enlaces de YouTube pertenecen a Alejandro Taylor y José Gordo, dos de los acusados por las estafas. Los videos fueron aportados como pruebas en la causa por parte de un damnificado que invirtió 1.000 dólares en el presunto negocio de las criptomonedas.
Durante la semana que pasó el fiscal de delitos complejos Enrique Gavier ordenó la prisión preventiva de todos los imputados. Se trata de Gustavo Adolfo Amuchástegui, Eduardo Alejandro Taylor, Edgar Nicolás Moreno, Mónica Gabriela Blasco, Mariana Noel López, Manuel Vicente Peralta Guevara, Andrés Matías López, Ariel Eduardo Morassut, Ricardo Beretta y Daniel Cornaglia.
Están acusados de ser coautores del delito de asociación ilícita, en calidad de organizadores. Van a continuar todos detenidos. Además siguen vigentes las órdenes de captura contra Ruja Ignatova y Konstantin Ignatov y José Gordo quienes se encuentran prófugos.
Desde la fiscalía han podido reconstruir que el monto de la estafa en el país ascendería a los tres millones de dólares; si se tiene en cuenta la cotización oficial del dólar esa cifra rondaría los 275 millones de pesos. Además, se ha podido identificar que las víctimas de esta estafa piramidal mediante el ofrecimiento de las criptomonedas, suman más de 100 en todo el país.
Además de la acción e investigación penal, en los próximos días las personas perjudicadas por OneCoin tienen previsto realizar una presentación civil reclamando y exigiendo un “resarcimiento o indemnización” a los responsables por el perjuicio económico y a su patrimonio. Quieren recuperar algo del dinero que confiaron en la firma acusada del “criptodelito”.
Cómo lo hacían. La organización, con sede central en Bulgaria, le prometía a sus inversores una ganancia y un retorno millonario. La supuesta firma OneLife promocionaba la criptomoneda OneCoin.
La tarea de captación comenzaba con la invitación a lujosas reuniones, congresos, charlas, cenas y megaeventos que se realizaban en Córdoba, Buenos Aires, San Luis y hasta en Río de Janeiro, con la intención de demostrar solvencia. Por ejemplo, uno de los denunciantes hace referencia a una espectacular cena en el exclusivo Restaurante Bistecca de Puerto Madero.
“Taylor pagó todo lo consumido esa noche”, aseguró en la denuncia uno de los participantes de ese encuentro.
“Todo era una puesta en escena para luego llevar adelante la maniobra defraudatoria. Promocionaban el producto con un trabajo refinado de atracción para lograr credibilidad y atrapar inversionistas. Es abundante toda la prueba que aportamos en contra de esta organización”, sentenció el abogado Pedro Despouy Santoro, quien representa a varios denunciantes.
Quien motorizó la primera denuncia, y a partir de allí la investigación, es un inversor cordobés que llegó a destinar 70 mil dólares en el negocio.
La promesa fue que el 8 enero del 2019 la criptomoneda que había adquirido llegaría a tener una cotización muy superior en el mercado de valores de Hong Kong. Eso nunca sucedió. Una de las hipótesis, es que los imputados y detenidos en la causa realizaron inversiones inmobiliarias en Panamá.